Olivorio Mateo, el mesías dominicano

 

Ni siquiera todas las balas que las tropas de ocupación norteamericana dispararon contra Olivorio, lo borraron de la cultura y la historia de República Dominicana. 99 años después de su asesinato, todavía se le recuerda como un curandero, profeta, guerrillero y líder mesiánico que encabezó una de las revoluciones campesinas más cruciales para este país.

 

El legado de Olivorio Mateo Ledesma se conserva en la cultura dominicana bajo los apodos de Papá Liborio y Maestro Livorio. En su época, le llamaron “brujo”, “dios moreno”, “dios silvestre”, entre otros.

 

La lucha de Papá Liborio contra la opresión ejercida por los ocupantes estadounidenses a los habitantes de las zonas rurales del Sur se conoce bajo el nombre de Liborismo. Según el libro Palma Sola: opresión y esperanza, este movimiento posee tres dimensiones:

 

  • Protesta social.
  • Recuperación de la identidad cultural.
  • Mesianismo.

 

Los seguidores de Olivorio Mateo canalizaron cada una de estas dimensiones a través de la religión. Las enseñanzas de Olivorio Mateo se basaron en la promesa de un regreso a un pasado de igualdad, paz y amor fraterno.

 

De acuerdo a la leyenda, al cumplir los 18 años, Liborio desapareció por siete días y apareció meditando  en las tierras de su padre. 

 

Yo no estoy loco. Vengo enviado por Dios a una misión que durará 33 años. Todo el que crea en mí se salvará”, dijo Mateo. 

 

 

A partir de ese momento, “empezó a curar personas y a tener un discurso apocalíptico y profético (diversos hechos concretos anunciados por Olivorio Mateo ocurrieron a posteriori, como el gobierno de Trujillo, los aeroplanos, la tierra arada, la radio, entre otros)”. También, realizó un peregrinaje por la provincia de San Juan de la Maguana y otras regiones del país.

 

En su mensaje, Olivorio llamaba a vivir en paz e incentivaba el culto a la Santísima Trinidad.

 

La influencia de Mateo en la sociedad de ese entonces se evidencia en una décima sobre cometa Halley, un cometa que se aproxima a la Tierra alrededor de cada 75 años, lo “que hace posible que un ser humano lo vea dos veces en su vida”:

 

Si mentamos al Santo 

nos prende la ley.

Líbranos, Señor, 

del cometa Halley.

Ya papá Olivorio

compró su escopeta,

apuntó pa el cielo

y tumbó el cometa.

 

Lucha

A partir de 1916 —cuando la isla fue ocupada por Estados Unidos— Olivorio empezó su defensa hacia los campesinos. Su lucha fue motivada por 12 ordenanzas agrícolas que perjudicaban a los campesinos. Algunas como: la Ley del Sistema Torrens, la Ley de Partición de los Terrenos Comuneros, la Ley de Registro de la Propiedad Privada y la Ley de las Concesiones Agrícolas.

 

La oposición de Olivorio y su grupo a los estadounidenses fue lo que les causó la muerte. Se rebelaron abiertamente contra la ocupación hasta el punto que se negaron a entregar sus armas al U.S Army. 

 

En 1920, el gobierno de intervención consideró a Liborio el “guerrillero más peligroso del país”. El 27 de junio de 192, tras atrincherarse con más de 200 hombres en la loma Sabrosa, próximo a la frontera, fue abatido a tiros junto a uno de sus hijos.

 

 

En la cultura moderna

Olivorio ha sido retratado en diversas áreas de la cultura. Una de las más conocidas, en la canción Liborio, del músico Luis Diaz (El Terror):

 

Dicen que Liborio e’ muerto

Ay, ay, ay

Liborio no e’ muerto na’

Ay, ay, ay

 

Liborio taba’ bailando

Ay, ay, ay

En lo’ campo de Samaná

Ay, ay, ay

 

Lo que pasa con Liborio

Ay, ay, ay

E’ que еl no come pendejá

 

El mundo del cómic también representó al líder mesiánico y a la matanza de Palma Sola. Este trabajo recibió el premio de bronce en el 13vo Concurso Internacional de Manga de Japón, siendo la primera vez que un cómic dominicano obtiene ese tipo de reconocimiento. 

 

Sabíamos lo que no queríamos hacer. No queríamos hacer superhéroes, ni ninjas, ni samuráis, entendíamos que con eso no podíamos reflejar nuestra cultura. La inspiración vino de buscar una historia o un evento dominicano lo suficientemente interesante para contar. Además de esto, también nos inspiramos en obras de la literatura latinoamericana”, dijo Gabriel Castillo en una entrevista con Cultura Cómic RD.

 

 

 

 

 

La más reciente obra que rinde honor a este personaje es “Liborio”, una película dirigida por Nino Martínez Sosa y presentada en el Festival Internacional Tertio Millennio del Vaticano en Roma, Italia y el Festival Internacional de Cine de Rotterdam.

 

 

 

 

 

 

 

Sin lugar a dudas, el legado de Olivorio Mateo es uno de los más significativos de un personaje de origen tan humilde. Con su ejemplo, hizo que empezara la lucha campesina en República Dominicana. 

 

Una batalla que todavía continúa.